jueves, 9 de agosto de 2012

Querido lector, me quito el sombrero por nuestra especie.


"El ser humano constituye desde el punto de vista biológico una especie animal bajo la denominación científica de Homo sapiens (del latín Homo=hombre, sapiens=sabio) y pertenece a la familia Hominidae. Los seres humanos pueden llegar a poseer capacidades mentales que les permiten inventar, aprender y utilizar estructuras lingüísticas complejas, matemáticas, escritura, ciencia, tecnología. Los humanos son entes sociales, capaces de concebir, transmitir y aprender conceptos totalmente abstractos. No se tiene evidencia de que exista otra forma de vida con dichas capacidades –o superiores– en el universo" -Wikipedia, The Free Enciclopedia.

Es sobrecogedor ver como un Homo Sapiens, usando un lenguaje creado por sí mismo y una maquina creada por si mismo, se define a sí mismo. Es hermoso, es pequeño, es absurdo. Es la belleza de encontrarle sentido a Wikipedia, es un 'no se qué' que nos dice que hay algo extrañamente irónico en la 'objetividad' de esas palabras. Es salirse de si mismo para vernos en nuestra insignificancia y estupidez infinita. Es ver como miento descaradamente intentando moverlo querido lector, de su cómoda existencia de Homo Sapiens del siglo XXI, tan lejos ya de aquel difuso antepasado al cual le debe su música, su dinero, su computador, sus televisores y modas y joyas; su riqueza, y toda la mierda, toda la misera, el hambre y la guerra que lo rodean, querido lector.  

¡Bravo, Bravo! ¡que viva nuestra especie, bailado sobre su propio caos! ¡Bravo, Bravo!